Post

Visualizzazione dei post da marzo, 2012

Amores computados (La historia de "Mi computadorita").

Casi puedo jurar que jamás pasó por mi mente 'tener mi propia computadora'. Las primeras noticias sobre 'las máquinas inteligentes', en mí y en muchos de nosotros, entonces trabajadores de una grande constructora -hablo de la década de los 80-, crearon angustia y miedo (casi pánico), debido al temor de 'quedar desplazados', sin trabajo, pues hasta entonces las planillas de sueldos y salarios, y toda documentación contable (y similares) eran hechos a mano. Quincenalmente trabajábamos dos días consecutivos, de amanecida, para completar el pago de jornales de cerca de mil obreros. Ayudados por simples calculadoras de 4 operaciones básicas, comenzábamos el martes por la tarde, miércoles día y noche, jueves día y noche, el viernes por la madrugada tenía que estar lista la Planilla. Aquel día se sacaba el dinero del banco, por la tarde se ensobraba y el sábado se pagaba a la gente. Se ganaba bien, recuerdo, pero ni aquel 'buen salario' de entonces me habría pe

La princesa y el 'observador'.

Immagine
ìQué roche!, que te pillen en una ceremonia oficial... mirándole el escote a la princesa real... yo me moriría de la vergüenza. El tipo queda mal parado, de verdad. El video no deja dudas, el pata (marido de la Presidente de Finlandia) que por el apellido más parece que fuera árabe (solo por decir), no puede controlar sus ojos que se le van 'casi a hurgar' en el escote de la esposa del Heredero al Trono de Dinamarca, el príncipe... no tiene sentido señalar el nombre, pero ella se llama Mary que es el nombre que más me gusta después de S+++++y que es el nombre de mi hija. Pero, yendo un poco a hurgar en el perfil de los varones, el 'comportamiento' de aquel 'observador de escotes', exagerado en su intención, no es nada del otro mundo, pues los hombres (léase varones) estamos hechos así. Somos unos puercos, perros... no sé cual animal podría distinguirnos mejor, ¿quizás el gallo que bailotea en torno a cada gallina que se le cruza en el corral? Es dec

Una lección 'de fuego'.

"El golpe enseña" quise titular a esta entrada, pero luego decidí lo que se lee en el encabezamiento, debido a que la experiencia -mi experiencia-, tiene directamente que ver propiamente con el fuego, la candela, esa cosa de mucha utilidad en nuestras vidas, pero que quema y puede hacer mucho daño, y porque realmente de aquella experiencia aprendí. El descubrimiento del fuego fue una gran bendición para nuestros primitivos antepasados hombres de las cavernas (léase bien de las cavernas, no de las tabernas, pues estos últimos son otros que no tienen nada que ver con aquellos). Gracias a ese calor vital de la candela, hoy por hoy, gozamos de todos los privilegios que la culinaria nos brinda en diversidad de viandas y platos, sofisticados o no, de las diversas cocinas del mundo. Pero el fuego no solo nos brinda eso. También nos da luz, calor y hasta frío si queremos, pero esos son asuntos de ingeniería que prefiero no abordar, más por desconocimiento que por falta de ganas. L

"Osito de felpa".

Immagine
Debe ser seguramente una canción de los 70s. "Osito de felpa" me ha gustado desde siempre y, más, desde cuando Ledinh, mi hijo, se marchara aquella madrugada del 15 de Enero 2003 en circunstancias hasta hoy no esclarecidas. Fue un accidente, sí. Dicen que el Tiempo cura todas las heridas, pero ésta, inferida a mi familia y a mí, ha sido tan, tan profunda que, a pesar de los nueve largos años transcurridos, el bendito tiempo no ha podido curar aún. Y dudo que la herida pueda sanar alguna vez. Sobre todo en nosotros sus padres la cicatriz permanecerá a perpetuidad. Mi hijo no era un bebé cuando se fue, pero igual, las veces que escucho la canción, me vienen a la memoria diversidad de momentos vividos con él. La alegría de cuando supe que nació varón, la ternura que hacía aflorar en mi mente y en mis sentimientos el verlo tan pequeñito e indefenso, y pensar que aquel ser se haría grande y fuerte. Más tarde, las bromas que me hacía, las bromas que yo le hacía a él, pero tambi